Menudo contraste: Coldenhove es una empresa productora en mitad de una zona forestal. A esto hay que sumarle que, de forma habitual, también trabaja con productos naturales. Y aquí es donde se produce una interacción respetuosa. Puesto que la verdadera base de nuestra empresa es el respeto por la naturaleza, hace décadas que la sostenibilidad está escrita en nuestro ADN. Nuestro lema: «Como la naturaleza es buena con nosotros, Coldenhove lo es también con la naturaleza». Por ejemplo, al ser copropietarios de Industriewater, una empresa de depuración de aguas de Eerbeek, apoyamos cualquier inversión y desarrollo que suponga la extracción de materias primas de nuestras aguas residuales.

Un buen vecino

Nuestro lema también se refleja en nuestro compromiso por ser un buen vecino y contribuir de forma positiva al medioambiente, es decir, si algo puede hacerse de una forma respetuosa con la naturaleza, lo haremos. Tanto dentro como en los alrededores de nuestra fábrica, Coldenhove se encarga del mantenimiento de 35 hectáreas de bosque. También colaboramos con nuestros vecinos (Landal Coldenhove, Stork Veco, la piscina municipal y varias residencias ubicadas alrededor de la propiedad) para producir compuestos activos que contribuyan a la generación y el uso compartido de la energía y el calor. Por último, es importante para nosotros que nuestros procesos de producción no afecten negativamente a nuestros vecinos. 

El estándar de sostenibilidad está cada vez más alto. Por este motivo, Coldenhove trabaja de forma proactiva para ser más eficiente. La metodología Lean Six Sigma (que Coldenhove emplea desde el 2010) nos ayuda a ser coherentes con nuestro objetivo de reducción de energía y consumo de materias primas por tonelada.